Psicología para la vida

El blog de Erika Almanza

Hijos, Padres

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Día del padre.

Hace unas semanas escuchaba a una colega decir lo importante que era el papel de los padres y el poco reconocimiento que le damos a su esfuerzo. Lo cual es muy cierto ya que en comparación del día de las madres, esta celebración se ve un tanto opacada. Ya que escuchamos spots en el radio todo el mes de mayo que nos sugieren los regalos para las mamás, en las escuelas no faltan los festivales donde los hijos les cantan, preparan números musicales, recitan, etc. Cosa que no se hace para el día del padre.

Y en este contraste tiene mucho que ver en como a lo largo de los años y generaciones atrás hemos aprendido que los papás son la dureza, seriedad, frialdad emocional y para muchos es la persona ausente. Aunque hoy en día ya no son actitudes exclusivas de los padres.

El día del padre es una hermosa celebración que invita a reconocer la gran labor que hacen todos estos hombres responsables en la crianza de sus hijos, con su papel de proveedores, cariño singular y ejemplo para sus hijos. El papel de la figura paterna es tan importante en la sociedad, en lo emocional y a nivel psicológico, queramos o no aceptarlo tiene un papel irremplazable.

No esperemos que llegue el tercer domingo de junio para festejar y apapachar a nuestros padres, siempre es buen día para reconocer su esfuerzo y agradecer todo lo bueno que aportan a nuestra vida. Por esta razón dedico esta publicación a todos los papás, agradeciendo y reconociendo su hermoso papel. El cual sabemos que no es sencillo y sin embargo día con día se esfuerzan para ser un mejor ejemplo. Gracias por interesarse en como nos sentimos, en lo que necesitamos y motivarnos en ser mejores.

Feliz día del padre.

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Relaciones que te harán crecer en libertad.

En diferentes ocasiones me ha tocado escuchar tanto hombres como a mujeres decir que estaban mejor solteros, o que al estar en una relación ya no podrían hacer esto o aquello. Lo cual deja muy claro que tenemos miedo a las relaciones y las ideas que tenemos de ellas muchas veces son equivocadas.

Las películas, las canciones y en televisión nos muestran una manera romántica, abnegada y equivocada de lo que es una relación de pareja. Nos hacen creer que la otra persona nos pertenece, que en realidad nos volvemos una sola persona y por lo tanto no podemos estar lejos del otro.

Si eso fuera cierto lógicamente la vida después de esto debiera ser distinta, ya no podríamos hacer todas las cosas que nos gustan, dejaríamos amistades y posiblemente objetivos personales, en fin una maraña de cosas que parecen una historia de terror. Obviamente nadie querría algo así, cuando la verdad es que vivir una relación de pareja llámese noviazgo o matrimonio es una experiencia enriquecedora y satisfactoria, te complementa y te hace feliz. Jamás dejas de ser tu, sino que tus pensamientos, objetivos y prioridades evolucionan en algo mucho mejor.

Para vivir una relación que te haga mejor persona en todas las áreas de tu vida, toma en cuenta lo siguiente:

  • Nosotros solo compartimos nuestra vida con esa otra persona. No le pertenecemos, ni el otro nos pertenece.
  • Seguimos siendo iguales con las mismas aspiraciones, gustos, familia, amigos, trabajo, etc.
  • Hacer planes en pareja que no trunquen los planes personales.
  • Apoyar y alentar al otro en su crecimiento profesional y personal.
  • Mantener comunicación efectiva.
  • Conocer el concepto que el otro tiene de una relación de pareja.
  • Compartir ideas similares para la relación.

 

Una de las características de una relación de pareja, es la igualdad y equidad en todos los sentidos. Una relación no es sencilla, pero si están convencidos de lo que quieren juntos y trabajan por eso crecerán sintiéndose libres.

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Aprender a amar

El tema del amor es tan amplio y por lo regular cuando se habla de el lo primero en que lo relacionamos es con la pareja, hijos, amigos, familia, etc. Y como no hacerlo, si los seres humanos siempre pensamos en los demás; “que necesita, que le molesta, que quiere, como se siente.” Pero ¿que hay de nosotros?

En muchas ocasiones nos dejamos al ultimo, y para poder amar a alguien necesariamente debemos aprender a reconocer nuestro valor, aceptarnos y amarnos. Recordemos que no podemos dar algo que no tenemos.

Reconoce tu valía. El auto reconocimiento es algo a lo que no estamos muy acostumbrados, ya que en ocasiones lo confundimos con ser arrogante o presuntuosos. Pero el saber reconocer nuestras virtudes, aptitudes y talentos; facilitara el crecimiento de confianza en nosotros mismos.

Acepta lo que hay en ti. Cuando aprendemos a reconocernos es mas fácil aceptar nuestras áreas fuertes y débiles, por consecuencia trabajar en eso que necesitamos mejorar.

Amate. Amar no es algo sencillo, para amar necesitamos conocer y aceptar. La manera mas sencilla de aprender a amar siempre será con nosotros mismos, a través del auto conocimiento. Sabiendo cuales son nuestras virtudes y aceptando lo que no nos gusta y no podemos cambiar de nuestra persona.

El valor de tu persona no se determina por los comentarios de los demás, sino por lo que crees de ti mismo.

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